El domingo 20 de enero nos
convocó Rafa a los senderistas en la puerta del Club a las 8 y ahí
estuvimos casi todos salvo Gonzalo que nos esperaba en el aparcamiento
antes de pasar la puerta de entrada a La Pedriza. Nuestra meta era la
cuerda de los Porrones, pero por las nevadas que cayeron durante la
semana pasada no pudimos llegar, así que la tenemos pendiente porque
vimos que es muy bonita.
En
la puerta de entrada a la Pedriza había una señal grande indicando que
si no llevábamos cadenas no podíamos entrar con coche al parque natural,
de modo que tuvimos que iniciar la excursión allí.
La
primera parte de la marcha la hicimos siguiendo la carretera y nos
desviamos en el camino forestal. Seguimos ese camino muy animados
porque el paisaje nevado era espectacular. Además el cielo se iba
abriendo con lo cual tendríamos el sol garantizado. No se oía nada, ni
siquiera a los pajaritos que a esas horas aún estaban dormidos.
Continuamos andando hasta que encontramos el sendero que nos llevaba a la Cuerda de los Porrones.
Sin
embargo como la vida está llena de sorpresas, y la montaña llena de
nieve, a uno de los senderistas le empezó a entrar agua en las botas
porque tenía unos buenos agujeros en cada una!!!!!!, menos mal que
estamos en el mes de las rebajas y aprovechará para comprar unas nuevas.
Como
somos un equipo estupendo pensamos que no podíamos seguir con una
avería así, de modo que nos dimos la vuelta y decidimos alargar la caña
del final de la excursión, y ya lo creo que lo conseguimos!!!!!.
Primero
quisimos ir a un sitio que descubrió Jesús que se llama El Taller del
Agua, pero está tan escondido que solo el coche de Rafa lo localizó y
los demás coches pensaron que mejor dejar ese bar para otro día y no
arriesgar la caña.
Por
fin conseguimos encontrarnos los 3 coches en el bar de La Charca Verde,
enfrente de la Iglesia de Manzanarres el Real, totalmente
aconsejable. Allí nos tomamos nuestras cañas, nuestros caldos y
nuestros torreznos!!!!!, unos torreznos de Soria maravillosos que tienen
tan poca grasa que parece que están hechos al vapor.
A
pesar de no haber conseguido terminar la excursión, el día ha sido
estupendo, hemos caminado, nos hemos reído, nos hemos relajado y ya
estamos preparados para empezar una nueva semana. Viva la montaña!!!!
Marta
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